El pasado 15 de mayo se celebró San Isidro Labrador, el patrón de los agricultores y, por supuesto, en El Pinar, algo teníamos que celebrar.
Entre semillas, tierra y flores, nace El Pinar como trabajo, naturaleza, esfuerzo y, por supuesto, campo.
Como homenaje a este día y al trabajo que realizamos diariamente, esa semana les dimos una pequeña sorpresa a nuestros compañeros, pues… siendo típicas de San Isidro, unas ricas rosquillas endulzaron nuestra celebración.
El Pinar es símbolo de trabajo, empeño, equipo y amor por el campo y por lo que hacemos, por lo que hoy, podemos mirar hacia
atrás y ver lo mucho que hemos cambiado, pero como cualquier agricultor, ¡seguimos mirando al cielo todos los días!
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